SOBRE MÍ
Hola, soy Joan Natzari. Y no. Lo siento, no es lo que estás pensando, Natzari es mi segundo nombre, no mi apellido. Para hacernos una idea, es como Juan Carlos, pues Natzari es mi Carlos de Juan Carlos.
Dicho todo esto es más fácil explicar quién soy. Nací un 1 de marzo de 1994 en Saint Joseph ‘s Hospital, en la ciudad de Londres, situado cerca de Toronto, Canadá.
Vale, está bien, eso es lo que le ocurrió a Justin Bieber. Yo nací un día ante, el 28 de febrero de 1994, y a unos 6.405km de distancia de diferencia.
Y por caerme pocas horas antes de la bolsa de la cigüeña soy Joan Natzari. Un niño amable y con un peinado muy típico de los 90.
SOBRE MÍ
Hola, soy Joan Natzari. Y no. Lo siento, no es lo que estás pensando, Natzari es mi segundo nombre, no mi apellido. Para hacernos una idea, es como Juan Carlos, pues Natzari es mi Carlos de Juan Carlos.
Dicho todo esto es más fácil explicar quién soy. Nací un 1 de marzo de 1994 en Saint Joseph ‘s Hospital, en la ciudad de Londres, situado cerca de Toronto, Canadá.
Vale, está bien, eso es lo que le ocurrió a Justin Bieber. Yo nací un día ante, el 28 de febrero de 1994, y a unos 6.405km de distancia de diferencia.
Y por caerme pocas horas antes de la bolsa de la cigüeña soy Joan Natzari. Un niño amable y con un peinado muy típico de los 90.
SOBRE MÍ
Hola, soy Joan Natzari. Y no. Lo siento, no es lo que estás pensando, Natzari es mi segundo nombre, no mi apellido. Para hacernos una idea, es como Juan Carlos, pues Natzari es mi Carlos de Juan Carlos.
Dicho todo esto es más fácil explicar quién soy. Nací un 1 de marzo de 1994 en Saint Joseph ‘s Hospital, en la ciudad de Londres, situado cerca de Toronto, Canadá.
Vale, está bien, eso es lo que le ocurrió a Justin Bieber. Yo nací un día ante, el 28 de febrero de 1994, y a unos 6.405km de distancia de diferencia.
Y por caerme pocas horas antes de la bolsa de la cigüeña soy Joan Natzari. Un niño amable y con un peinado muy típico de los 90.
Sobre mí
Hola, soy Joan Natzari. Y no. Lo siento, no es lo que estás pensando, Natzari es mi segundo nombre, no mi apellido. Para hacernos una idea, es como Juan Carlos, pues Natzari es mi Carlos de Juan Carlos
Dicho todo esto es más fácil explicar quién soy. Nací un 1 de marzo de 1994 en Saint Joseph ‘s Hospital, en la ciudad de Londres, situado cerca de Toronto, Canadá.
Vale, está bien, eso es lo que le ocurrió a Justin Bieber. Yo nací un día ante, el 28 de febrero de 1994, y a unos 6.405km de distancia de diferencia.
Y por caerme pocas horas antes de la bolsa de la cigüeña soy Joan Natzari. Un niño amable y con un peinado muy típico de los 90.
La verdad que de niño recuerdo tener una buena infancia, dentro de lo estándar de aquella época. Nada fuera de lo normal, excepto por una particularidad. A partir de iniciar el curso en preescolar y según pasaban los años, tanto mi familia como los profesores se dieron cuenta de que tenía dificultad al hablar. Era tartamudo. Pero tanto profesores como especialistas se sorprendían de la naturalidad con la que lo mostraba y la fácil sociabilidad que tenía con los demás compañeros.
Tuve la suerte de saber ganar a la gente y no sufrir bullying como tanta gente sufre a día de hoy. Simplemente tuve suerte.
Con 17 años dejé los estudios que no me gustaban y me volví un “nini”. Un gran año para pensar. Fue cuando decidí que, con lo valioso que es el tiempo, no quería perderlo ni en estudios, ni trabajos ni lugares en los que no quería estar. Me sinceré conmigo mismo y fue cuando reconocí que quería ser humorista, actor, monologuista… Por mucho que fuera tartamudo, no veía por qué no luchar, o al menos intentarlo.
Y así fue, nada más cumplir los 18 años, en menos de 2 meses, encontré trabajo para poder pagarme mis propios estudios de Monólogo, que inicié con 19 años en Performart.
Y así es como Justin Bieber, por nacer 1 día tarde y 6.405km más lejos, se perdió ser un joven tartamudo de Santa Perpètua de Mogoda, donde inició su carrera HUMORÍSTICA
Ser tartamudo y querer dedicarse a la comedía tenía un plus de ventaja y desventaja. Pero rápido vi que no siempre podía controlar mi tartamudez por mucho que ensayase y que los nervios van y vienen según la situación. Así que después de probar los primeros textos decidí empezar a reírme de mi tartamudez y no esconderla.
Con mis primeros textos puse en práctica lo aprendido en las escuelas, Set d’Acció, Escuela oficial de comedia, Performart.
Los primeros textos y amistades que se formaban dentro del mundo, pude formar mi primer espectáculo con 2 compañerxs más. TODO ENCAJA.
Poco a poco pude ir escribiendo más material hasta poder llegar actuar solo por bares y locales con mi espectáculo propio “#Noteatasquescontuvida”. Ahí pude saborear la vida de un cómico.
Nace un escalón nuevo para afrontar, y así es como conseguí saltar de los bares al teatro con mi primer espectáculo en cartelera. “OYE SIRI”. Este espectáculo, nació de la dificultad de un tartamudo al hablar con un dispositivo móvil que no es capaz de entender.
Este espectáculo le guardó especial cariño ya que con él se inició el salto a la profesionalidad. El aprender semana tras semana me hacía avanzar más rápido. Fue así como de estar en cartelera solo con 1 mes de prueba “OYE SIRI” pasó a estar 2 años en cartelera.
Todo a la mierda… me gustaría no comentar este capítulo, pero forma parte. Otro año de parón sin actuar y sin nada. “OYE SIRI” muere en estado de alarma y sin despedida alguna. Dejar de actuar a la fuerza me provoca una depresión en la que me permito estar 1 año de respiro. Fue como chocar nada más entrar en la autopista justo al coger la velocidad permitida.
Ese año de Respiro igual que con el de los 17 me planteo muchas cosas. No dejo acabar de rendirme y sigo con mis proyectos tanto personales como artísticos. Y es así cómo nace con más ganas e ilusión que nunca. “Oye Siri, Dime Joan”.
“Oye Siri, Dime Joan” es la meta personal y artística más unida que he hecho nunca. En mitad del año de respiro por covid, imparto mil formas y maneras para dejar de tartamudear en un alto porcentaje y “Oye Siri, Dime Joan” es el reto a formar parte. Nace nuevo Joan Natzari y nace nuevo Show dónde cojo de la mano el arte y lo personal para avanzar un paso más.
La verdad que de niño recuerdo tener una buena infancia, dentro de lo estándar de aquella época. Nada fuera de lo normal, excepto por una particularidad. A partir de iniciar el curso en preescolar y según pasaban los años, tanto mi familia como los profesores se dieron cuenta de que tenía dificultad al hablar. Era tartamudo. Pero tanto profesores como especialistas se sorprendían de la naturalidad con la que lo mostraba y la fácil sociabilidad que tenía con los demás compañeros.
Tuve la suerte de saber ganar a la gente y no sufrir bullying como tanta gente sufre a día de hoy. Simplemente tuve suerte.
Con 17 años dejé los estudios que no me gustaban y me volví un “nini”. Un gran año para pensar. Fue cuando decidí que, con lo valioso que es el tiempo, no quería perderlo ni en estudios, ni trabajos ni lugares en los que no quería estar. Me sinceré conmigo mismo y fue cuando reconocí que quería ser humorista, actor, monologuista… Por mucho que fuera tartamudo, no veía por qué no luchar, o al menos intentarlo.
Y así fue, nada más cumplir los 18 años, en menos de 2 meses, encontré trabajo para poder pagarme mis propios estudios de Monólogo, que inicié con 19 años en Performart.
Y así es como Justin Bieber, por nacer 1 día tarde y 6.405km más lejos, se perdió ser un joven tartamudo de Santa Perpètua de Mogoda, donde inició su carrera HUMORÍSTICA
Ser tartamudo y querer dedicarse a la comedía tenía un plus de ventaja y desventaja. Pero rápido vi que no siempre podía controlar mi tartamudez por mucho que ensayase y que los nervios van y vienen según la situación. Así que después de probar los primeros textos decidí empezar a reírme de mi tartamudez y no esconderla.
Con mis primeros textos puse en práctica lo aprendido en las escuelas, Set d’Acció, Escuela oficial de comedia, Performart.
Los primeros textos y amistades que se formaban dentro del mundo, pude formar mi primer espectáculo con 2 compañerxs más. TODO ENCAJA.
Poco a poco pude ir escribiendo más material hasta poder llegar actuar solo por bares y locales con mi espectáculo propio “#Noteatasquescontuvida”. Ahí pude saborear la vida de un cómico.
Nace un escalón nuevo para afrontar, y así es como conseguí saltar de los bares al teatro con mi primer espectáculo en cartelera. “OYE SIRI”. Este espectáculo, nació de la dificultad de un tartamudo al hablar con un dispositivo móvil que no es capaz de entender.
Este espectáculo le guardó especial cariño ya que con él se inició el salto a la profesionalidad. El aprender semana tras semana me hacía avanzar más rápido. Fue así como de estar en cartelera solo con 1 mes de prueba “OYE SIRI” pasó a estar 2 años en cartelera.
Todo a la mierda… me gustaría no comentar este capítulo, pero forma parte. Otro año de parón sin actuar y sin nada. “OYE SIRI” muere en estado de alarma y sin despedida alguna. Dejar de actuar a la fuerza me provoca una depresión en la que me permito estar 1 año de respiro. Fue como chocar nada más entrar en la autopista justo al coger la velocidad permitida.
Ese año de Respiro igual que con el de los 17 me planteo muchas cosas. No dejo acabar de rendirme y sigo con mis proyectos tanto personales como artísticos. Y es así cómo nace con más ganas e ilusión que nunca. “Oye Siri, Dime Joan”.
“Oye Siri, Dime Joan” es la meta personal y artística más unida que he hecho nunca. En mitad del año de respiro por covid, imparto mil formas y maneras para dejar de tartamudear en un alto porcentaje y “Oye Siri, Dime Joan” es el reto a formar parte. Nace nuevo Joan Natzari y nace nuevo Show dónde cojo de la mano el arte y lo personal para avanzar un paso más.
La verdad que de niño recuerdo tener una buena infancia, dentro de lo estándar de aquella época. Nada fuera de lo normal, excepto por una particularidad. A partir de iniciar el curso en preescolar y según pasaban los años, tanto mi familia como los profesores se dieron cuenta de que tenía dificultad al hablar. Era tartamudo. Pero tanto profesores como especialistas se sorprendían de la naturalidad con la que lo mostraba y la fácil sociabilidad que tenía con los demás compañeros.
Tuve la suerte de saber ganar a la gente y no sufrir bullying como tanta gente sufre a día de hoy. Simplemente tuve suerte.
Con 17 años dejé los estudios que no me gustaban y me volví un “nini”. Un gran año para pensar. Fue cuando decidí que, con lo valioso que es el tiempo, no quería perderlo ni en estudios, ni trabajos ni lugares en los que no quería estar. Me sinceré conmigo mismo y fue cuando reconocí que quería ser humorista, actor, monologuista… Por mucho que fuera tartamudo, no veía por qué no luchar, o al menos intentarlo.
Y así fue, nada más cumplir los 18 años, en menos de 2 meses, encontré trabajo para poder pagarme mis propios estudios de Monólogo, que inicié con 19 años en Performart.
Y así es como Justin Bieber, por nacer 1 día tarde y 6.405km más lejos, se perdió ser un joven tartamudo de Santa Perpètua de Mogoda, donde inició su carrera HUMORÍSTICA
Ser tartamudo y querer dedicarse a la comedía tenía un plus de ventaja y desventaja. Pero rápido vi que no siempre podía controlar mi tartamudez por mucho que ensayase y que los nervios van y vienen según la situación. Así que después de probar los primeros textos decidí empezar a reírme de mi tartamudez y no esconderla.
Con mis primeros textos puse en práctica lo aprendido en las escuelas, Set d’Acció, Escuela oficial de comedia, Performart.
Los primeros textos y amistades que se formaban dentro del mundo, pude formar mi primer espectáculo con 2 compañerxs más. TODO ENCAJA.
Poco a poco pude ir escribiendo más material hasta poder llegar actuar solo por bares y locales con mi espectáculo propio “#Noteatasquescontuvida”. Ahí pude saborear la vida de un cómico.
Nace un escalón nuevo para afrontar, y así es como conseguí saltar de los bares al teatro con mi primer espectáculo en cartelera. “OYE SIRI”. Este espectáculo, nació de la dificultad de un tartamudo al hablar con un dispositivo móvil que no es capaz de entender.
Este espectáculo le guardó especial cariño ya que con él se inició el salto a la profesionalidad. El aprender semana tras semana me hacía avanzar más rápido. Fue así como de estar en cartelera solo con 1 mes de prueba “OYE SIRI” pasó a estar 2 años en cartelera.
Todo a la mierda… me gustaría no comentar este capítulo, pero forma parte. Otro año de parón sin actuar y sin nada. “OYE SIRI” muere en estado de alarma y sin despedida alguna. Dejar de actuar a la fuerza me provoca una depresión en la que me permito estar 1 año de respiro. Fue como chocar nada más entrar en la autopista justo al coger la velocidad permitida.
Ese año de Respiro igual que con el de los 17 me planteo muchas cosas. No dejo acabar de rendirme y sigo con mis proyectos tanto personales como artísticos. Y es así cómo nace con más ganas e ilusión que nunca. “Oye Siri, Dime Joan”.
“Oye Siri, Dime Joan” es la meta personal y artística más unida que he hecho nunca. En mitad del año de respiro por covid, imparto mil formas y maneras para dejar de tartamudear en un alto porcentaje y “Oye Siri, Dime Joan” es el reto a formar parte. Nace nuevo Joan Natzari y nace nuevo Show dónde cojo de la mano el arte y lo personal para avanzar un paso más.